Los bollos preñaos son esos bocadillos portátiles de pan relleno de un buen cacho de chorizo asturiano y en ocasiones también tocino. Estos panecillos típicos de Asturias están riquísimos y no pueden faltar en ninguna espicha asturiana ni en romerías y excursiones varias. Pues aquí va la receta. Y que corra la sidra.

La masa para los bollos preñaos se hace con frecuencia enriquecida con algo de mantequilla y huevo, pero he de confesar que a mí me gusta más la masa recia de pan sin enriquecer, y así los he hecho para este artículo. Se pueden modelar en forma de rollitos o en redondo, y lo del tamaño, aunque habitualmente no es grande, va mucho al gusto del consumidor. O sea, depende de cuántos consumáis, triperos.

Lo suyo es rellenar los bollos con un buen chorizo ahumado asturiano, pero a falta de ello yo he cometido la herejía de usar una linda chistorra. Amigos asturianos, no me crucifiquéis, que no tengo fundamento. El caso es usar un embutido de calidad que deje el pan rezumando grasa.

Receta de bollos preñaos

Ingredientes:

Masa de pan

• 500 g de harina panadera (si queréis usar harina de escanda los bollos serán más genuinos)
• 350 g de agua
• 10 g de sal
• 5 g de levadura de panadero seca (o 15 g de levadura fresca)

Relleno

• Dos o tres buenos chorizos asturianos

Elaboración:

• Hacemos la masa como un pan normal. Mezclamos la harina panadera, el agua, la sal y la levadura de panadero, y amasamos a mano o con robot amasador en intervalos de 1-2 minutos separados por reposos de 10 minutos, hasta que esté fina y elástica.

• Hacemos una bola con la masa, la ponemos en un bol engrasado, la tapamos y dejamos que doble el volumen. Cuando haya doblado la pasamos a la encimera enharinada y la aplastamos con la mano para quitarle las burbujas de gas que se han formado.

• La pesamos y la cortamos con una rasqueta en tantas porciones como queramos; yo he hecho un preñao grandote y otros seis más pequeños.
• Aplastamos cada porción en forma rectangular y ponemos la cantidad de chorizo o embutido que queramos, al que previamente le habremos quitado la piel.

• Envolvemos el chorizo haciendo un rollito con la masa. Sellamos la unión aplastándola con el canto de la mano, para que quede bien pegadita. Aunque a mí me encanta que revienten un poco los bollos en el horno y rezume toda la grasaza roja.

• Vamos poniendo los bollos formados sobre una bandeja forrada con papel de hornear. Los espolvoreamos un poco con harina y los tapamos con plástico para que no se resequen mientras fermentan. Dejamos que doblen el volumen de nuevo.
• Cuando estén levaditos metemos la bandeja en el horno a 230 ºC (sin aire), vaporizamos algo de agua y los cocemos 15 minutos. Bajamos la temperatura a 190 ºC y seguimos cociéndolos otros 20 minutos. Los sacamos a una rejilla para que se enfríen por completo.

Ya veis que hacer unos bollos preñaos no es tan difícil si ya tenemos cierto control de hacer pan y masas. Miradlos qué monos bien pringadillos de grasa choricera. Ah, y como he dicho son fantásticos para vuestros picnics venideros, que seguro que dentro de poco llega el buen tiempo, no desesperéis.

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