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Receta de nubes de azúcar


Receta de nubes de azúcar

Las nubes de caramelo «marshmallows» (en inglés) son muchísimo más fáciles de hacer de lo que uno se imagina, con esta receta podéis convertir estas fantásticas chuches en un complemento perfecto para las fiestas infantiles y las no tan infantiles.

Las nubes de caramelo son el resultado de montar una gelatina solidificada, a diferencia de lo que muchos piensan, no es un merengue, es decir, no llevan huevo, aunque la forma de montarlo es muy parecida a la de un merengue suizo, los ingredientes son bien distintos.

Esta es la receta básica de nubes de vainilla pero se puede adaptar con los sabores o aromas que más os apetezca, incluso ponerle trocitos de caramelo triturado dentro o ponerles un poco de cacao y canela, frambuesa, toffee… sólo hay que subirse a las nubes y dejar volar la imaginación.

Receta de nubes de vainilla

Ingredientes:

Nubes:
Mezcla de azúcar glas:

Elaboración:

  • Si utilizamos gelatina en polvo la pondremos en nuestro bol de la batidora o robot de cocina junto con el agua caliente y mezclamos hasta que se combine. Si utilizamos láminas de gelatina, antes las hidrataremos en agua muy fría y cuando estén blandas, las pasamos a la batidora con agua caliente y mezclamos hasta que se disuelvan. Reservamos.

sirope nubes

  • En un cazo, ponemos el azúcar extrafino (caster sugar) junto con la glucosa y el agua extra, cocemos a fuego bajo y removemos hasta que el azúcar esté disuelto. Subimos a fuego fuerte y dejamos que hierva. Colocamos el termómetro de caramelo y sin remover dejamos que cueza durante unos 6 minutos o hasta que la temperatura alcance los 115ºC.

pico de pato merengue nubes

  • Con nuestra batidora de varillas a velocidad máxima (en el bol tenemos el agua con la gelatina), vamos añadiendo el sirope (mezcla de azúcar, glucosa y agua) sin prisa pero sin pausa pues el caramelo enseguida se endurece y podríamos echarlo a perder. Añadimos las semillas de vainilla y batimos durante 5-7 minutos o hasta que esté espesa y esponjosa; un poco antes de que termine añadiremos el colorante en gel que hayamos escogido, la cantidad que utilicemos dependerá del tono que queramos conseguir.
  • Trabajando deprisa esparcimos la mezcla en un molde de unos 20cm x 30 cm engrasado y dispuesto con papel antiadherente en la base y los bordes.

  • Con la ayuda de una espátula alisamos la masa y cubrimos con papel de hornear antiadherente engrasado. Refrigeramos durante 2 horas como mínimo.
  • Preparamos la mezcla de azúcar glas tamizando la maizena junto con el azúcar y lo guardamos en un bol grande.

  • Una vez la mezcla haya estado en la nevera un par de horas ésta se habrá endurecido ligeramente. Para cortar las nubes espolvorearemos la superficie de trabajo con la mezcla de azúcar glas y maizena y volcaremos allí la mezcla compacta, quitamos con cuidado el papel antiadherente y espolvoreamos con más mezcla de azúcar glas.
  • Para cortar las nubes podemos utilizar un cuchillo o bien cualquier cortador de galletas que nos guste, sólo tenemos que untarlos bien con mezcla de azúcar y maizena y cortar, debemos ir untando el cuchillo cada dos veces con la mezcla porque sino las nubes se  pegarán y será complicado cortarlas.

Esta receta de nubes de azúcar puede adaptarse de infinitas maneras, podéis hacer desde nubes de chocolate hasta ponerles trozos de caramelo dentro. El secreto está en trabajar muy rápido y tener todos los ingredientes y material preparados antes de cada paso. Las nubes aguantan hasta una semana en un recipiente hermético en la nevera. ¡Ya veréis que una vez las hayáis saboreado, ya no querréis volver a probar las nubes industriales!

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Carolina

Desde que era una niña una de mis pasiones ha sido la repostería, colecciono libros de postres desde que tengo uso de razón. A los 18 años decidí estudiar Dirección Hotelera especializándome en postres y desde entonces he ido formándome continuamente hasta convertir mi hobby en mi profesión. Todo ello unido a otra de mis pasiones, la fotografía me han llevado a compartir mis creaciones con todo el mundo a través de mi blog: La cocina de Carolina.