Receta de donuts clásicos
En general, tenemos la idea de que los donuts clásicos son ese bollo con forma de rosquilla gorda que nos venden con el nombre comercial Donuts®, pero no es así. El nombre de estos bollos tan yanquis es la castellanización de la palabra inglesa doughnut, que significa literalmente trozo de masa. En los Estados Unidos lo aplican a diversos tipos de bollos en forma de rosquilla y que habitualmente se preparan fritos; también a bollos con el mismo tipo de masa, pero con forma de berlinesas, es decir, redondos y sin agujero, que se suelen rellenar con diversas cremas o mermeladas.
Aunque los norteamericanos sean quienes los han popularizado en todo el mundo, este tipo de bollo procede de Centroeuropa, probablemente de los Países Bajos y de Alemania (por algo las berlinesas se llaman así…). Se trata en esencia de una masa similar a la del brioche, con menos mantequilla. Todos estos tipos de donuts pueden llevar glaseados más o menos historiados, o la cobertura más sencilla, que consiste simplemente en azúcar aromatizado o no.
La receta que traemos hoy al blog no es de donuts igualitos que los comerciales, primero porque los comerciales llevan ingredientes que en casa no necesitamos usar, para mantenerlos en buen estado más de un día. Con esta receta los haremos mucho más ricos.
Receta de donuts paso a paso
Ingredientes:
Masa de donuts:
- 250 ml de leche entera
- 380-430 g de harina de media fuerza
- 10 g de levadura seca de panadería (o 30 g de levadura fresca)
- 30 g de azúcar glas (o azúcar normal disuelto en la leche)
- Media cucharadita de sal
- Una vaina de vainilla o media cdta. de extracto
- Tres yemas de huevo
- 50 g de mantequilla ablandada
- Aceite de oliva virgen para freír
Glaseado clásico de azúcar:
- 250-300 g de azúcar glas comercial (el triturado en casa no sirve)
- Tres o cuatro cdas. de agua
Elaboración:
- Pesamos la levadura en un cuenco. En un bol hacemos un prefermento con toda la levadura, 180 g de leche y 180 g de harina. Dejamos fermentar hasta que suba y burbujee.
- Cuando haya levado el prefermento, mezclamos en un bol grande con el resto de la leche, la harina, el azúcar, la sal, la vainilla o el extracto y las tres yemas de huevo, hasta que quede una mezcla uniforme. Amasamos bien, mejor con el método francés. Es mejor añadir primero solo 380-400 g de harina e ir aumentando poco a poco según se vea la masa, para no pasarnos de firmeza. Debe quedar blandita, pero no inmanejable.
- Aplastamos la masa sobre la encimera y añadimos la mantequilla ablandada en el centro. La envolvemos con la masa y amasamos hasta que se incorpore por completo. Hacemos una bola, la pasamos a un cuenco aceitado, tapamos y dejamos doblar el volumen.
- Volcamos la masa sobre la encimera enharinada y la desgasamos bien, pues de lo contrario nos pueden salir burbujas extrañas en los donuts formados. Dividimos la masa en 16 porciones para donuts normales, hasta 12 para donuts gigantes (podemos pesar toda la masa y dividir las porciones exactamente).
- Hacemos bolas con las porciones, las boleamos, y con los dedos abrimos un agujero en el centro. A partir del agujero se va estirando la rosquilla hasta hacer un anillo como de la mitad de grosor del donut final. Deben quedar finitas y abiertas, pues crecen mucho.
- Vamos poniendo las rosquillas sobre una bandeja o en la encimera muy enharinada, porque tienden a pegarse mucho cuando levan. Dejamos levar los donuts tapados con plástico o con un paño húmedo.
- Comprobamos el punto de levado: se enharina uno el dedo meñique y se aprieta ligeramente el donut por un ladito: si la masa se recupera rápidamente, aún no están listos, si se recupera lentamente están en su punto, si no se recupera y queda la marca del dedo, se han pasado de fermentación (se pueden reformar una vez).
- Calentamos dos dedos de aceite de oliva en una sartén (también se puede en freidora), a fuego medio-bajo, y vamos friendo los donuts. Tardan un minuto por cada cara, aproximadamente. No deben hacerse muy rápido, pues podrían quedar crudos por dentro. Los sacamos con una espumadera a una rejilla con papel absorbente. Dejamos enfriar ligeramente antes de glasearlos.
- Para glasearlos ponemos el azúcar glas en un cuenco y añadimos agua poco a poco sin parar de mezclar, hasta conseguir una consistencia adecuada para bañar los donuts. Debe ser lo suficientemente fluido como para escurrir por ellos. Mojamos cada donut en el glaseado y lo sacamos a escurrir sobre rejilla. Dejamos secar el glaseado hasta que esté firme al tacto.
Referencia: Doughnuts: Simple and Delicious Recipes to Make at Home. Lara Ferroni.
Estos donuts están más ricos el mismo día que se hacen y no aguantan en buenas condiciones más de dos días. Se puede mejorar su conservación añadiendo dos cucharaditas de glicerina a la masa. La glicerina es un alcohol comestible. También se pueden dejar sin glaseado, guardar en un plástico y volver a calentar ligeramente en el horno. Quedan casi como recién hechos. Cuando hago estos donuts clásicos en casa mis hijos me hacen la ola… desaparecen visto y no visto. Son tiernos y riquísimos. ¡Un vicio total!