Receta de fave dei morti
Nos acercamos poco a poco a Halloween y al día de Todos los Santos y esta receta de fave dei morti, o habas de muertos, muy típica de diferentes regiones italianas, nos viene que ni pintada. Se dice que en la antigüedad las habas eran un medio de comunicación entre el mundo de los vivos y de los muertos. Si observamos la flor del haba vemos que es de color blanco con una mancha negra; este último color, el negro, simboliza el misterio y no es un color muy común en el mundo vegetal. En contraposición con el blanco inmaculado de esta flor, expresa simbólicamente la dualidad de la vida y la muerte.
Se creía que las habas tenían el poder de poner en contacto las almas de los vivos con la de los muertos y por ello eran muy comunes en las ceremonias fúnebres en Grecia y en Egipto. Probablemente esta historia haya sido el inicio de una tradición que ha llegado hasta nuestros días y que consiste en ofrecer pequeños presentes, en forma de habas dulces, a los difuntos que, durante estas fechas, se cuenta, vuelven entre nosotros, vagan por la tierra, y a veces hasta se ponen en contacto con parientes y amigos.
Sea como sea, creamos o no creamos, podemos simplemente disfrutar de estas galletitas hechas principalmente con almendras y enriquecidas con ingredientes diferentes dependiendo de la región de la que provengan. A mí me ha gustado mucho esta versión con piñones porque de todos los frutos secos quizás sean los que más me gustan, pero si queréis prescindir de ellos en su lugar se puede utilizar avellanas o, sencillamente, aumentar la cantidad de almendras.
Receta de fave dei morti
Ingredientes (para 8-10 personas):
- 300 g de almendras peladas
- 50 g de piñones
- 150 g de harina
- 150 g de azúcar glas
- 1 limón
- 2 yemas y 1 huevo entero
- 1 cucharadita de canela en polvo
- 1 cuchara de grappa u orujo
- 1 cuchara de licor de Alchermes
- 1 cuchara de cacao en polvo
Elaboración:
- Empezamos triturando los frutos secos. Para ello lo mejor es utilizar un robot de cocina. Trituramos primero las almendras y después los piñones. Tienen que quedar pulverizados.
- Se puede hacer también con la batidora pero hay que tener cuidado de parar de vez en cuando para que las cuchillas no se calienten demasiado. Si las cuchillas se calientan pasan el calor a los frutos secos y estos pierden su aceite creando una masa en vez de una harina. Una solución es picar los frutos secos con parte del azúcar.
- Ponemos en la mesa la harina, creamos un hueco en el centro y añadimos las almendras y los piñones molidos. Tamizamos el azúcar glas y lo añadimos a la mezcla anterior. Añadimos la piel del limón rallada y la canela.
- Mezclamos bien los ingredientes con las manos. Dividimos la mezcla en tres partes iguales.
- Mezclamos el primer 1/3 de huevo batido con la grappa u orujo, el segundo con el licor Alchermes y el tercero con el cacao. Batimos bien y añadimos cada uno de los tercios con los tercios de harina y frutos secos.
- Amasamos con las manos hasta obtener tres masas compactas. Al principio la masa parece que se desmiga pero a medida que vamos amasando los ingredientes se van incorporando. Si vemos que no se compactan tendremos que añadir un poco de agua, poquísima: basta mojarse ligeramente las manos y seguir trabajando la masa.
- Envolvemos cada una de las masas con film transparente y las dejamos reposar durante una hora.
- Pasado este tiempo tomamos las masas y formamos cilindros de unos 2 cm de diámetro sobre una superficie ligeramente enharinada. Cortamos trocitos de unos 2 cm de ancho con una rasqueta.
- Pasamos las habas o fave, una a una, entre las manos. Este último paso es importante para compactar la masa, más que para darle forma redonda a las galletitas. Las disponemos en una placa forrada con papel de horno y las dejamos reposar el tiempo que el horno tarda en calentarse. Lo calentamos a 180°C.
- Cocemos las habas durante unos 12-15 minutos hasta que estén ligeramente doradas. Las sacamos del horno y dejamos enfriar completamente antes de servir.
Las fave dei morti se pueden preparar todas del mismo color. En vez de dividir la masa en tres y mezclarla con los diferentes sabores, podemos elegir el que más nos guste y utilizarlo para aromatizar toda la pasta. Aunque sí resulta un poco más laborioso yo prefiero utilizar todos los ingredientes, la diferencia de color no es muy evidente pero cada una de ellas tiene un aroma diferente que hace que merezca la pena el esfuerzo.
El Alchermes es un licor italiano muy aromático que se utiliza principalmente para la preparación de dulces. Aunque si a primera vista llama la atención su intenso color carmesí en esta preparación no cambia sustancialmente el color de la pasta. Si además del aroma queremos aumentar el color de nuestras fave podemos utilizar algunas gotas de algún colorante.