Bizcocho fácil de canela
Este bizcocho de canela no solo es uno de los más ricos que he probado en mi vida (en serio, aunque bien es cierto que adoro la canela), sino que es facilísimo porque no lleva ni claras a punto de nieve ni huevos montados ni mantequilla esponjada. Solo levadura química, de modo que se prepara en un momento.
Aunque la receta está tomada de la web de Martha Stewart, este tipo de bizcocho bajito con cobertura de migas crujientes o streusel por encima es muy típico de la repostería centroeuropea.
La cobertura crujiente con sabor a canela le da muchísima gracia a este bizcocho y si lo hacemos con uno de nuestros estupendos moldes cuadrados podremos tomar kaffee und kuchen como si estuviéramos en una konditorei al más puro estilo alemán o austriaco.
Bizcocho fácil de canela
Ingredientes:
- 300 g de harina de repostería
- 145 g de azúcar + dos cdas.
- Una cdta. de levadura química
- 1/2 cdta. de sal
- 115 g de mantequilla
- Una cdta. de canela
- Un huevo grande
- 180 g de leche entera
- Dos cdas. de mantequilla derretida
Elaboración:
- Sobre un bol pasamos por el tamiz la harina de repostería con la levadura química. Agregamos el azúcar y la sal. Mezclamos bien.
- Añadimos la mantequilla fría y frotamos la grasa con los sólidos con la yema de los dedos, hasta dispersar la mantequilla y obtener una mezcla arenosa.
- Dividimos esta mezcla en dos partes iguales. En una de ellas añadimos las cucharadas adicionales de azúcar y la canela. Reservamos.
- A la segunda parte de la mezcla le agregamos la leche y el huevo batido. Mezclamos bien con unas varillas o un tenedor; no hace falta que quede perfectamente homogéneo.
- Vertemos esta mezcla en un molde cuadrado forrado con papel de hornear.
- Derretimos las dos cucharadas de mantequilla y las regamos por encima de la masa.
- Repartimos a continuación todas las migas de canela por encima de la masa, intentando que queden lo más uniformes posible.
- Metemos el molde de inmediato en el horno previamente calentado a 180ºC, a un nivel bajo con calor por arriba y por abajo (mejor no cocerlo con aire, porque al ser tan fino se puede resecar mucho). Cocemos el bizcocho unos 35 minutos, hasta que una brocheta insertada en el centro salga limpia.
- Sacamos el molde y, tirando del papel, pasamos el bizcocho a una rejilla para que se enfríe.
Me gustan los bizcochos cuadrados o rectangulares porque se dosifican muy bien en pequeñas porciones, y si además servimos este bizcocho de canela en un stand tan precioso como este de mármol, perfecto para bizcochos y tartas cuadrados, lucirá muchísimo más. Lo devoraréis.