Receta de flan parisién
Hoy nos hemos endulzado el día con una receta de flan parisién o flan pâtissier, un clásico de la repostería francesa que si sois de los que estando en Francia visitáis tantas pastelerías como sea posible, sabéis de qué tarta estamos hablando.
Preparamos una masa quebrada y una crema pastelera aromatizada con vainilla, y enriquecida con mantequilla en pomada. Para hornearla hemos usado un molde desmontable que nos gusta mucho por el grosor de la base y los bordes que ayudan a mantener y distribuir mejor el calor.
Para hacer la masa quebrada, pâte brisée o pasta quebrada, hemos añadido yemas, como lo hace A cozinha Colectiva en la receta que hemos usado de base. Y para la crema pastelera, hemos echado mano de una receta clásica enriquecida con nata, en las mismas proporciones que la leche.
Llevamos a la mesa nuestro flan parisién en el stand negro de cerámica de Miss Étoile. Y para servirla nada mejor que los platos de postre Kallia Pale Pink combinados con las servilletas de papel Donna White, ambos de GreenGate… ¡A que son muy chulos!
Flan pâtissier
Ingredientes:
Para la masa quebrada:
- 250 g de harina de repostería
- 125 g de mantequilla muy fría
- Una pizca de sal y de azúcar
- 2 yemas
- 60 ml de agua fría
Para la crema pastelera:
- 500 g de leche
- 500 g de nata
- 3 huevos
- Una yema
- 200 g de azúcar
- 2 cucharaditas de extracto de vainilla
- 80 g de almidón de maíz
- 30 g de mantequilla en pomada
Elaboración:
- Para hacer la masa quebrada tamizamos la harina y las pizcas de sal y azúcar un par de veces. Le añadimos la mantequilla en pequeños trozos y trabajamos frotando la harina y la mantequilla con las palmas de las manos, o con los dedos.
- Añadimos las yemas y el agua, y trabajamos hasta poder hacer una bola; no es necesario trabajarla mucho. La ponemos en un plato, la cubrimos con papel film y la refrigeramos una hora.
- Calentamos el horno a 180º C., espolvoreamos la mesa de trabajo con harina y extendemos la masa con un rodillo. El grosor no debería superar el medio centímetro.
- Forramos un molde desmontable de 20 cm de diámetro con la masa quebrada y pinchamos con un tenedor.
- Cubrimos con papel de horno y llenamos de bolas de cerámica o legumbres secas. Horneamos durante 15 minutos o hasta que la masa esté seca. La retiramos del horno, quitamos el papel de horno con los pesos y dejamos enfriar. Reservamos.
- Para hacer la crema batimos en un cuenco grande los huevos, las yemas y el azúcar.
- Añadimos el extracto de vainilla junto con el almidón de maíz, echamos la leche y la nata, que habremos mezclado, calentado y colado previamente.
- Pasamos la mezcla a una cazuela, dejamos hervir durante un minuto y retiramos del fuego. Dejamos reposar 10 minutos antes de añadirle la mantequilla en la crema. Dejamos enfriar.
- Batimos la crema con unas varillas, la echamos en el molde y horneamos durante 45 minutos, o hasta que la crema haya cuajado del todo.
- Retiramos del horno, dejamos enfriar y guardamos en la nevera, por lo menos 4 horas antes de desmoldarla y servirla.
Qué mejor plan para estas tardes invernales que un trozo de esta deliciosa receta de flan patissier o parisién y un aromático vaso de vino dulce… ¡la merienda perfecta! Que la disfrutéis tanto como lo hemos hecho nosotros en casa.
Consejos útiles:
- El extracto de vainilla lo podéis sustituir por dos vainas de vainilla. Tendréis que partirlas por la mitad y dejarlas en infusión durante media hora con la leche, y la nata, calientes. Cuando vayáis a preparar la crema raspáis las vainas con un cuchillo para quitar las semillas y las añadís a la crema. Podéis desechar las vainas.
- Las yemas en la pasta quebrada son opcionales, podéis hacer la receta auténtica añadiéndole unas cuantas gotas de agua muy fría para formar la bola. El resultado será una masa más quebradiza y crujiente.
- Una vez horneada la tarta podéis pincelar la superficie con mermelada de albaricoque, le dará brillo y un ligero sabor afrutado al pastel.
- La masa o pasta quebrada podéis cambiarla por hojaldre si lo preferís.