Springerle: galletas centenarias con moldes tallados a mano
El origen de las galletas Springerle se remonta a hace más de 500 años, en Alemania, donde las imágenes en relieve de estas galletas servían para contar historias cuando la mayoría de la gente no sabía leer ni escribir. Así se contaban bodas, nacimientos y otras historias. Los moldes originales ahora forman parte de museos y colecciones privadas, y estas réplicas son fieles reproducciones talladas a mano de esos modelos originales, algunos de los cuales datan de 1600. Dos son los ingredientes peculiares y esenciales de las galletas Springerle: el aroma de anís y el bicarbonato de amonio o hartshorn, precursor de la levadura química.