Tarta helada de crujiente y caramelo
Hoy hemos hecho una tarta helada de crujiente y caramelo. Sí, continuamos con postres helados porque son muy ricos y rápidos de hacer, pero sobre todo porque son muy refrescantes. Si os gustan los helados de caramelo y vainilla tenéis que hacer esta tarta.
Al ver la receta original de Creations by Kara nos pareció una tarta deliciosa así que tardamos muy poco en ponernos a preparar un crujiente con nueces, azúcar moreno, mantequilla y avena, y un helado de leche condensada, queso, nata y vainilla.
Para congelarla hemos usado un molde redondo desmontable de 15 cm de diámetro que trae un plato incorporado para servir, pero como nos gustan las tartas elevadas y el caramelo empezará a caer al echarlo hemos puesto el plato sobre el stand blanco de Birkmann.
Tarta helada de crujiente y caramelo
Ingredientes:
Para la base:
- 100 g de galletas María pulverizadas
- 15 g de azúcar
- 40 ml de mantequilla fundida
Para el crujiente:
- 80 g de azúcar moreno
- 50 g de copos de avena
- 90 g de nueces troceadas
- 55 g de mantequilla en pomada
Para el helado de leche y queso:
- 150 g de queso crema
- 265 g de leche condensada
- 250 ml de nata
- Media cucharadita de extracto de vainilla
- 25 g azúcar glas (opcional)
- 80 ml de sirope de caramelo o salsa de caramelo
Elaboración:
- Para la base mezclamos las galletas con el azúcar y la mantequilla fundida en un cuenco, y cubrimos el fondo de un molde desmontable de 15 cm de diámetro. Guardamos en la nevera mientras preparamos la tarta.
- Para hacer el crujiente calentamos el horno a 180º C. y mezclamos en un cuenco todos los ingredientes. Cubrimos el fondo de una fuente para horno pequeña y horneamos durante 15 minutos, o hasta que esté dorado.
- Sacamos del horno y lo troceamos con un tenedor. Dejamos que se enfríe completamente.
- Para el helado de leche y queso batimos el queso y poco a poco vamos añadiéndole la leche condensada. Reservamos.
- Montamos la nata con la vainilla y el azúcar glas en un robot de cocina, recordad no montarla del todo para que no se os corte cuando la mezcléis con el queso y la leche condensada.
- Mezclamos de forma envolvente la nata con el queso con leche condensada y echamos la mitad del relleno sobre la base de galletas. No olvidéis que podéis pincelar aceite de nueces o antiadherente al molde antes de rellenarlo, para un desmoldado perfecto.
- Cubrimos con la mitad del crujiente y la mitad del sirope de caramelo.
- Volvemos a cubrir con la mitad del relleno restante y después con todo crujiente que nos ha sobrado. Tapamos con papel film y congelamos durante al menos ocho horas.
Desmoldamos nuestra deliciosa tarta helada de crujiente y caramelo, rociamos toda la superficie con la mitad sobrante del sirope de caramelo y llevamos inmediatamente a la mesa. Estamos seguros que pronto formará parte de vuestro recetario de verano… ¡A disfrutarla!
Algunos consejos útiles:
- Si queréis hacer una la salsa de caramelo casera bastará con hacer un caramelo con 200 gramos de azúcar. Cuando esté dorado le añadís 125 mililitros de nata y 60 mililitros de mantequilla fundida. Lo mezcláis muy bien y le añadís media cucharadita de vainilla, y lo dejáis enfriar antes de rociar la superficie de la tarta.
- Nosotros no le añadimos azúcar glas a la nata, nos parece suficiente con el grado de dulzor que le proporciona la leche condensada, la salsa de caramelo y el crujiente.
- Podéis sustituir las nueces por nueces pecanas, almendras o pistachos.