Title Image

Cómo hacer un cheesecake de chocolate paso a paso


Cómo hacer un cheesecake de chocolate paso a paso

Hoy os enseñamos cómo hacer un cheesecake de chocolate paso a paso y nos pondremos las botas con una repostería que a muy poca gente le desagrada, es más, me atrevería a decir que cada vez tiene más adeptos y encontraremos fácilmente adictos a estos deliciosos pasteles.

Estoy seguro de que ya contáis con vuestra propia receta así que esta vez hacemos un cambio y le añadimos chocolate para quedar mejor con los chocoadictos. Si eres de los míos sabes lo que significa esto, ¿verdad?… ¡puro estado de placer! Y fresas frescas para decorarlo.

La receta no tiene ningún misterio y es prácticamente como cualquier tarta de queso: se mezclan huevos, azúcar y queso con una base de galletas trituradas. Y si sois de quesos fuertes, unos gramos de queso curado no estarían nada mal. ¿Os atrevéis a probarlo?

Receta de cheesecake de chocolate

Ingredientes:

  • 150 g de galletas de chocolate trituradas
  • 45 g de azúcar
  • 30 g de chocolate negro al 70% troceado
  • 30 g de mantequilla fundida
  • 650 g de queso crema
  • 150 g de queso curado (opcional)
  • 160 g de azúcar
  • Ralladura de una naranja
  • 3 huevos batidos
  • 30 ml de ron añejo
  • 200 g de chocolate negro al 70 % fundido
  • 600 g de fresas frescas sin las hojas para decorar
  • Miel o azúcar invertido para decorar

Elaboración:

  • Calentamos el horno a 230º C. y preparamos un molde desmontable de 20 centímetros de diámetro con mantequilla y harina en los bordes.
  • En un cuenco se echan las galletas, el azúcar y el chocolate muy troceado.preparamos un molde
  • Añadimos la mantequilla fundida y mezclamos bien.
  • Cubrimos el fondo del molde con la preparación y presionamos un poco con las manos o una taza medidora. Horneamos durante 10 minutos.preparamos la base
  • Retiramos del horno y dejamos templar sobre una rejilla.
  • Mezclamos el queso crema, el azúcar, la ralladura de naranja, los huevos, el queso curado (si lo usamos) y el ron en un cuenco grande con unas varillas o un robot de cocina.enfriamos la base y batimos el queso
  • Añadimos el chocolate fundido al batido de queso y mezclamos hasta que esté completamente incorporado.
  • Vertemos la mezcla en el molde y metemos al horno. Pasados los primeros 10 minutos de cocción bajamos la temperatura a 130º C. y continuamos horneando hasta que el cheesecake esté completamente cuajado (una hora aproximadamente), o hasta que al pincharlo con una brocheta salga limpia.añadimos el chocolate
  • Retiramos del horno y dejamos reposar sobre una rejilla hasta que ya no esté caliente, y podamos desmoldarlo.
  • Cuando nuestra tarta de queso y chocolate esté a temperatura ambiente la pasamos a un stand para tartas con ayuda de un elevador de tartas. Decoramos con las fresas frescas.dejamos templar y decoramos

Guardamos nuestro cheesecake de chocolate en la nevera durante al menos cuatro horas para que los sabores sean homogéneos y mucho más ricos, mejor si lo dejamos toda una noche. Cuando lo vayamos a servir pincelamos las fresas con miel o azúcar invertido para darles brillo.

cheesecake de chocolate con fresas 1

Algunos consejos útiles:

  • Podemos sustituir el chocolate negro por chocolate blanco.
  • Las galletas se pueden cambiar por masa quebrada o azucarada.
  • Podemos dividir el batido de queso en dos partes y echarle el chocolate tan solo a una parte para hacer un cheesecake marmoleado.
  • Podemos añadir la mitad de las fresas al batido cuando ya esté mezclado con el chocolate y el resto usarlo para la decoración.
  • Me gusta el chocolate negro por su pureza y por el bajo contenido en manteca, pero podéis usar el que más os guste… ¡Atreveos a usar chocolates con sabores distintos!
  • Si queréis darle a esta tarta de queso y chocolate un poco más de sabor lácteo añadidle los 150 gramos de queso curado rallado, cuanto más seco y curado más sabor tendrá.
  • Las fresas, que no son imprescindibles para la receta, se pueden sustituir por frambuesas, arándanos, mango o una mezcla de frutos rojos.

Raúl

La cocina y la fotografía han sido, desde que era muy pequeño, dos de mis grandes pasiones. Disfrutaba en casa destapando las cazuelas en las que hervían los guisos y, apenas con seis años de edad, empecé a saborear la primera cámara que mis padres me regalaron por Navidades. Había que estudiar algo "respetable" y "serio", y mis primeros estudios se encaminaron a cursar la carrera de arquitectura. Ya con el título en la mano, y después de trabajar durante un tiempo en arquitectura -y con la familia contenta-, decidí aprender cocina y fotografía en profundidad. Aprendí de grandes maestros en ambos campos y todavía sigo haciéndolo. En la actualidad mezclo recetas, técnicas e historias de cocina con fotografía en El Oso con Botas.