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Corazones de mousse para San Valentín


Receta corazones para San Valentín

Corazones de mousse para San Valentín

Os traemos estos corazones para San Valentín, hechos con una mousse de frambuesa, que os robaran el corazón. Están super ricos, son muy fáciles de hacer y los podéis hacer con antelación sin ningún problema.

Tendréis que hacer una mousse de frambuesa para los corazones y para ello vais necesitar este molde de Silikomart. Además, tendréis que hacer una cobertura espejo con gelatina, chocolate blanco, leche condensada, glucosa, colorante rojo y aroma a frambuesa.

Para darles un toque más llamativo en la decoración, vamos a usar hojas de oro comestible y vamos a acompañar con frambuesas frescas… ¡Vais a enamorar a vuestras parejas!

Receta de corazones de mousse

Ingredientes (para 6 corazones):

Para la mousse de frambuesa:

  • 6 g de gelatina en polvo
  • 3 cdas. de agua
  • 2 huevos medio batidos
  • 240 g de puré de frambuesas
  • 100 g de azúcar
  • 280 g de nata montada

Para la cobertura espejo de frambuesa:

Elaboración:

Para la mousse de frambuesa:

  • Echamos las frambuesas en el vaso de una batidora de mano, las trituramos y pasamos el puré por un colador.
  • Echamos la gelatina en polvo en un pequeño tarro y le añadimos las tres cucharadas de agua, mezclamos y dejamos reposar durante cinco minutos aproximadamente.
  • Mezclamos los huevos con el puré de frambuesa y el azúcar, y calentamos al baño María hasta que haya espesado (80º C.).
  • Retiramos del fuego, añadimos la gelatina, mezclamos hasta que la gelatina se haya diluido y pasamos por un colador. 
  • Tejamos templar hasta que esté a 30º C. y mezclamos con la nata montada de forma envolvente. 
  • Llenamos las seis cavidades del molde “Amorini” con la mousse, le damos unos golpes contra la mes de trabajo y nivelamos la superficie con ayuda de una espátula.
  • Ponemos sobre una bandeja y congelamos por lo menos 24 horas.

Para la cobertura espejo de frambuesa:

  • Ponemos a hidratar la gelatina en polvo con el agua en un cuenco, dejamos que se hidrate (5 minutos aproximadamente). 
  • Echamos la gelatina hidratada en un cuenco y añadimos el chocolate blanco troceado, la leche condensada, el colorante rojo y el aroma a frambuesa.
  • En un cuenco para baño María echamos la glucosa, el azúcar y los 37 g de agua, y calentamos al hasta que un termómetro alcance 103º C.
  • Vertemos el almíbar en el cuenco con chocolate y gelatina, dejamos reposar un poco para que el chocolate se funda, mezclamos con cuidado y pasamos por un colador.
  • Dejamos templar hasta que el termómetro alcance entre 30 y 35º C. para poder cubrir los corazones de frambuesa.

Para cubrir y decorar los corazones de frambuesa:

  • Retiramos el molde de corazones del congelador, desmoldamos con cuidado y colocamos los corazones sobre aros, o tapas pequeñas, puestas sobre de una bandeja para baños.
  • Vertemos la cobertura espejo sobre los corazones, le damos un par de golpes  la bandeja para eliminar el exceso de cobertura y  alisar la superficie de los corazones.
  • Ponemos los corazones en platos individuales y refrigeramos para que se descongele la mousse.
  • Cuando vayamos a servirlos los decoramos con la hoja de oro comestible y alguna frambuesa fresca.

¿A qué son muy chulos estos corazones para San Valentín? Y no veáis que rica está la mousse de frambuesas. Ah, y si no os gustan las frambuesas podéis hacerlo con fresas, cerezas o la fruta que más os guste.

Receta corazones para San Valentín

Raúl

La cocina y la fotografía han sido, desde que era muy pequeño, dos de mis grandes pasiones. Disfrutaba en casa destapando las cazuelas en las que hervían los guisos y, apenas con seis años de edad, empecé a saborear la primera cámara que mis padres me regalaron por Navidades. Había que estudiar algo "respetable" y "serio", y mis primeros estudios se encaminaron a cursar la carrera de arquitectura. Ya con el título en la mano, y después de trabajar durante un tiempo en arquitectura -y con la familia contenta-, decidí aprender cocina y fotografía en profundidad. Aprendí de grandes maestros en ambos campos y todavía sigo haciéndolo. En la actualidad mezclo recetas, técnicas e historias de cocina con fotografía en El Oso con Botas.