Calabazas de merengue para Halloween
Estas calabazas de merengue de Halloween son la prueba de que para hacer dulces divertidos hay veces que no es necesario complicarse, o complicarse poco. Con merengue, colorante naranja y una boquilla adecuada formamos unas divertidas calabacitas, que además podemos hacer con antelación porque se conservan de miedo… jeje.
La idea procede de nuestra querida Donna Hay, que tiene salidas para todo. Se usa un merengue francés normal y corriente, el más fácil de hacer de todos los merengues (si quieres saber más sobre merengues, lee nuestro artículo sobre la materia), para el que solo necesitas claras y azúcar. La faena se remata pintándoles unos divertidos rasgos con chocolate negro.
Para montar bien el merengue conviene tener por lo menos unas varillas eléctricas, pues hay que batirlo varios minutos, hasta que el azúcar se disuelva en las claras. Por ello hay a quien le gusta usar lo que llaman caster sugar, que tiene los granos más finos que nuestro azúcar común.
Calabazas de merengue de Halloween
Ingredientes (para 25-30 calabazas):
- 150 g de claras (unas 5 claras M)
- 220 g de azúcar blanquilla
- Una cdta. de vinagre
- Colorante naranja
- Cobertura de chocolate negro
Elaboración:
- Pesamos todos los ingredientes en la báscula. Si vuestras claras pesan más o pesan menos de 150 g, prorrateamos la cantidad de azúcar.
- Ponemos las claras con el vinagre en un bol y montamos con un robot o varillas eléctricas a velocidad media-alta; cuando estén manifiestamente espumosas vamos añadiendo el azúcar a cucharadas sin dejar de batir.
- Cuando hayamos acabado todo el azúcar proseguimos batiendo; el merengue está listo cuando al frotar una porción entre los dedos no se percibe el granillo del azúcar, señal de que este se ha disuelto en las claras.
- Añadimos ahora el colorante naranja; este tono es poco cubriente, de modo que hay que añadir bastante para conseguir un color naranja apreciable. Mezclamos bien hasta llegar al tono que nos guste.
- Preparamos una manga desechable con una boquilla rizada, cortando la punta a la manga (empecé a trabajar con una boquilla 1M, pero no me gustaba cómo quedaban las calabacitas y la cambié por una boquilla para eclairs). Colocamos la manga dentro de un vaso alto con el borde vuelto hacia fuera y pasamos el merengue a la manga con la espátula. Cerramos la boca de la manga con una pinza.
- Preparamos una bandeja de horno y cortamos un papel de horno a su medida. Pegamos el papel a la bandeja aplicando unos pegotitos del propio merengue en las esquinas.
- Formamos pegotes de merengue de unos 3-3,5 cm de base (si quieres, puede pintar círculos en el papel para guiarte), poniendo la manga no demasiado pegada al papel y formando montones regordetes con punta.
- Metemos la bandeja en el horno precalentado a 120 ºC, sin aire, y cocemos las calabacitas 30 minutos o hasta que se despeguen del papel con facilidad. Sacamos la bandeja y dejamos enfriar sobre el propio papel puesto encima de una rejilla.
- Derretimos un puñadito de gotas de cobertura de chocolate negro, en un bol en el microondas o sobre un cazo con un dedo de agua hirviendo, que no toque el bol. Cortamos un triángulo de papel de hornear, como se ve en las fotos, y hacemos un cucurucho. Le cortamos la puntita (igualmente podemos volver a usar una manga desechable).
- Con el chocolate derretido pintamos ojos y boca a las calabazas y dejamos secar.
Ya veis con qué poca cosa hacemos estas remonísimas calabazas de merengue para Halloween, con su carita de pillas, que les encantarán a los peques y serán una decoración de Halloween bonita y divertida, y que además no se estropea, porque el merengue bien seco dura semanas. A por ellas.