Esta charlota de limón para cumpleaños es un regalo perfecto para cualquier celebración; con paredes y base de bizcocho, rellena de una deliciosa crema de limón, la receta, está inspirada en este simpático vídeo japonés, es ligera y perfecta para los amantes del limón en los dulces.

Ya sabéis, las charlotas o carlotas son unas tartas que se montan con bizcocho por fuera y, ocasionalmente, en la base, y se rellenan de mousse. Las carlotas se pueden montar con bizcochos de soletilla comprados, pero en este caso el bizcocho lo preparamos casero en forma de plancha continua, simulando soletillas pequeñas al dosificar la masa con una manga.

Para preparar esta charlota o carlota hemos usado un comodísimo molde de paredes de silicona desmontables que la deja tan linda como la veis; su base de porcelana blanca permite presentar la tarta tal cual. Esta tarta no es difícil, pero requiere organización, puesto que lleva varias elaboraciones distintas. Los bizcochos se pueden preparar y montar el día anterior a servirla, teniendo la precaución de envolver bien el molde para que no se resequen.

Receta de charlota de limón

Ingredientes (para molde de 15 cm*):

Bizcocho ligero

• 2 huevos
• 60 g de azúcar
• 100 g de harina de repostería
• azúcar glas

Almíbar de calar

• El zumo de medio limón
• 25 g de azúcar

Crema de limón

• 2 limones grandes
• 2 huevos
• 65 g de azúcar
• 3 g de gelatina en polvo
• 100 g de nata líquida (mín. 35% grasa)

Merengue italiano

• 30 g de clara de huevo
• 20 g de agua
• 50 g de azúcar

* Si quieres hacer una carlota más grande, consulta nuestro artículo sobre cómo adaptar cantidades a otro tamaño de molde.

Elaboración:

Bizcocho ligero

• Pesamos todos los ingredientes del bizcocho en la báscula.
• Dibujamos sobre papel de hornear dos bandas de 6 cm de altura y un círculo de 15 cm de diámetro. Colocamos un tapete de teflón sobre el dibujo, de forma que se transparente, o le damos la vuelta al papel de hornear, así podemos escudillar la masa de bizcocho siguiendo el dibujo con las dimensiones justas.

• Separamos las yemas de las claras de los huevos y montamos las claras, con un robot o varillas eléctricas. Cuando estén ya espumosas agregamos el azúcar en varias veces, sin dejar de batir, hasta obtener un merengue no excesivamente duro.
• Agregamos las yemas de huevo, mezclando con espátula con delicadeza para no bajar el merengue. Agregamos la harina de repostería previamente tamizada y volvemos a mezclar con cuidado.

• Pasamos esta masa de bizcocho a una manga pastelera desechable con boquilla lisa de 1 cm. Primero escudillamos una espiral en el círculo de 15 cm para la base. Espolvoreamos toda la masa con azúcar glas una vez; esperamos un minuto a que la masa cruda lo absorba y volvemos a espolvorear
• Formamos churros de masa sobre las bandas de 6 cm de altura, unos junto a otros para formar la pared exterior de la tarta; la masa da para formar una banda y media, aproximadamente, que da de sobra para la pared del molde. Espolvoreamos también de azúcar glas antes de cocer.

• Cocemos los bizcochos 12-15 minutos en el horno previamente calentado a 180 ºC. Cuando estén dorados los sacamos y los invertimos sobre una rejilla; retiramos el papel o el tapete de teflón.
• Sobre una superficie lisa, recortamos con un cuchillo uno de los lados de la banda de bizcocho hasta dejarla de 5 cm de altura. Usando un molde de 15 cm, marcamos la base del bizcocho y recortamos una porción del borde para dejarla de unos 14 cm de diámetro.

• Doblamos la banda de bizcocho, abriendo un poco las uniones de las ondulaciones, y la colocamos pegada a las paredes del molde de forma que cubra bien todo el perímetro, con la cara ondulada mirando hacia fuera. Asentamos la base dentro con cuidado, de forma que quede ajustada para que no queden huecos entre paredes y fondo. Tapamos para que no se reseque el bizcocho mientras preparamos el relleno.

Crema de limón

• Pesamos todos los ingredientes en la báscula. Exprimimos el zumo de los dos limones con un exprimidor y lo colamos.
• Ponemos el zumo en un cazo y agregamos los dos huevos y el azúcar. Calentamos a fuego muy suave sin dejar de remover, hasta que espese, a unos 82-83 ºC. Ojo con pasarse, que se puede cortar. El espesado se aprecia bien; desaparece una espumilla que tiene siempre en la superficie la crema antes cuajar.

• Hidratamos la gelatina en un poco de agua fría un minuto y añadimos a la crema caliente. Homogeneizamos y dejamos enfriar por completo.
• Montamos la nata líquida bien fría batiendo a velocidad media-alta en un robot o con varillas eléctricas y añadimos en varias tandas a la crema de limón, mezclando con una espátula y movimientos suaves y envolventes.

Almíbar de limón

• Ponemos en un bol el zumo del limón colado con el azúcar y lo calentamos en el microondas hasta que el azúcar se haya disuelto.

Montaje de la charlota

• Con el almíbar caliente y un pincel de silicona pintamos las paredes y el fondo de bizcocho de la tarta. Vertemos la crema de limón preparada; alisamos un poco la superficie y llevamos a la nevera varias horas para que coja firmeza por la gelatina.

Merengue italiano

• Batimos la clara en un bol con varillas eléctricas hasta que esté montada, pero blanda aún, y, mientras tanto, ponemos el azúcar con el agua a calentar en un cazo a fuego medio hasta que un termómetro de sonda marque unos 118 ºC.

• Cuando el almíbar esté listo, vamos vertiéndolo a hilo sobre la clara, sin dejar de batir con las varillas. Después de añadir todo el almíbar proseguimos batiendo hasta que el merengue se haya enfriado a temperatura ambiente. Pasamos el merengue a una manga pastelera con boquilla rizada.

• Sacamos la tarta de la nevera y formamos un adorno en forma de rizo continuo en la parte exterior de la crema de limón, como se ve en la foto; para ello viene muy bien usar un stand giratorio.
• Desmoldamos la tarta retirando los laterales de silicona y acabamos el adorno quemando la superficie del merengue con un soplete de cocina. Podemos adornar con alguna rodajita de limón.

Fijaos lo remonísima que queda la charlota de limón servida sobre un lindo stand amarillo a juego con su sabor a limón, con nuestros platos, nuestros vasos de café y nuestras cucharitas. Bonita y muy detallosa para cualquier celebración especial.

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