Con esta tarta de árbol de Navidad os traemos otra idea para postre de Navidad, tomada de aquí, bonitísima y más fácil de lo que creéis. Usamos el concepto que apareció hace unos años de montar capas de galleta con relleno de algún tipo de crema, en este caso de queso, con adornos variados para decorarla, del estilo de esta tarta de Pascua.

Hemos usado una receta francesa de pan de especias para las capas de galleta cortadas con este cortador de árbol, muy similar al gingerbread, pero menos dulce, que me gusta mucho porque es muy fácil y no lleva huevo. Con la misma masa se preparan las galletitas con motivos navideños que se usan de adorno y que hemos cortado con estos resalaos cortadores navideños.

Los adornos de merengue están hechos con merengue suizo y con una boquilla rizada y otra boquilla lisa para manga pastelera. Como veis, la tarta tiene varios componentes que se pueden hacer en distintas etapas: las galletas se pueden preparar con antelación y conservar en una caja metálica, los merengues también porque se conservan sin ningún problema.

Receta de tarta árbol de Navidad

Ingredientes:

Galleta de especias

• 160 g de mantequilla ablandada
• 120 g de azúcar
• 160 g de miel o de sirope
• Una cdta. de sal
• Dos cdtas. de canela molida
• Una cdta. de bicarbonato sódico
• 440 g de harina de repostería
• Un poco de leche, si hiciera falta

Merenguitos de colores

• Dos claras de huevo (unos 80-90 g)
• 150 g de azúcar
• Unas gotas de limón
• Colorante fucsia
• Colorante turquesa

Crema de queso

• 500 ml de nata líquida (mínimo 35% de grasa)
• 500 g de chocolate blanco de cobertura
• 600 g de queso crema a t.ª ambiente

Adorno

• Sprinkles fucsia, rosa y turquesa variados
• Sprinkles mix pink dream

Elaboración:

Galleta de especias

• Pesamos los ingredientes en la báscula. Pasamos la harina de repostería por un tamiz junto con el bicarbonato sódico y la canela molida. Agregamos la sal y reservamos.
• Ponemos en un bol la mantequilla ablandada con el azúcar y batimos a velocidad media-alta con robot con pala o batidora de varillas, hasta que la mezcla esponje y blanquee.

• Añadimos la miel y batimos para homogeneizar. Agregamos entonces los sólidos y mezclamos hasta que la masa cohesione. Si quedara demasiado seca añadiremos un poco de leche.
• Dividimos la masa en tres porciones iguales y extendemos la primera sobre un papel de horno, hasta un grosor de 4-5 mm (si disponemos de un rodillo graduado, va muy bien para estos menesteres).

• Cuando tengamos la lámina de masa estirada al grosor adecuado y con una forma más o menos triangular, aplicamos el cortador grande de árbol y cortamos una capa de galleta. Retiramos la masa sobrante y la envolvemos en plástico.
• Tapamos la masa cortada y la llevamos a la nevera sobre una bandeja. Repetimos la operación otras dos veces con las dos porciones restantes de masa, estirando, cortando y llevándolas a la nevera (se pueden apilar unas encima de otras con cuidado).

• Estiramos una porción de la masa sobrante y cortamos los motivos navideños de adorno con los cortadores pequeñitos, también sobre un papel de horno. Los llevamos a la nevera igualmente para que se ponga firme la masa mientras calentamos el horno a 180ºC.
• Cuando el horno esté caliente, metemos la primera capa de galleta y cocemos 10-12 minutos, hasta que esté dorada. Hacemos lo propio con las otras dos capas de galleta y con las galletas pequeñas. Las sacamos todas a enfriar en su mismo papel sobre una rejilla.

Merenguitos de adorno

• Ponemos las claras en un bol y agregamos el azúcar. Llenamos con un dedo de agua un cazo donde se pueda encajar el bol sin que toque el agua. Llevamos el agua a ebullición y removemos las claras y el azúcar con varillas sin parar, hasta que el azúcar se haya disuelto para hacer un merengue francés. Lo ideal es que llegue a unos 45ºC (va muy bien un termómetro de cocina).
• Retiramos el bol del vapor y batimos con varillas varios minutos, hasta que se enfríe el merengue a temperatura ambiente, momento en el que estará listo para usar.

• Dividimos la masa en dos partes iguales; teñimos una porción con el colorante fucsia, mezclando con espátula, y la otra con el colorante turquesa. Preparamos dos mangas pasteleras desechables con boquillas. Hemos usado una boquilla rizada para los merengues turquesa y una boquilla lisa para los de color fucsia.
• Formamos los merenguitos sobre un papel de horno fijado a una bandeja con pegotitos de merengue, para que no se nos mueva (sobrarán merenguitos, pero hacer menos cantidad es latoso). Secamos los merengues en el horno a 85-90ºC, mejor con aire (si no tenéis aire en el horno, subid la temperatura a 110ºC) por lo menos una hora, hasta que al tirar de ellos se despeguen sin esfuerzo del papel, señal de que están listos.

Crema de queso

• Pesamos en una báscula el chocolate. Pasamos por el microondas para que se derrita un poco. Calentamos la nata en un cazo hasta que burbujee por las paredes. La vertemos encima del chocolate y dejamos reposar un par de minutos. Cuando haya reposado, removemos con varillas hasta obtener una crema lisa y brillante. Dejamos enfriar y la metemos en la nevera por lo menos dos horas; es esencial que la ganache esté muy fría.
• Batimos el queso ligeramente con robot o varillas eléctricas para suavizarlo. Añadimos la ganache de chocolate blanco muy fría y batimos a velocidad baja primero para mezclar, rebañando bien el fondo de vez en cuando.

• Subimos la velocidad y montamos la crema, hasta que tenga una consistencia suficientemente firme para distribuirla con manga pastelera; las varillas deben dejar surcos claramente en la crema y esta debe tener un aspecto casi de nata montada. Pasamos la crema de queso y chocolate a una manga pastelera con una boquilla lisa.

Montaje de la tarta

• Colocamos la primera galleta con forma de árbol sobre un stand o fuente. Aplicamos la crema de queso y chocolate en forma de pegotitos, llenando toda la superficie de la galleta. Colocamos encima la segunda galleta en forma de árbol, presionamos ligeramente para nivelar y volvemos a cubrir con pegotes de crema. Tapamos con la tercera galleta y cubrimos con crema la última capa.

• Adornamos la última capa de crema con las galletitas con motivos navideños, los merengues de colores y los sprinkles a tono, a nuestro gusto, cubriendo más o menos.
• Llevamos la tarta a la nevera para que la crema se ponga más firme y ya la tenemos. Esta tarta hay que montarla justo antes de servirla para que la crema no se reseque en exceso.

Esta tarta de árbol de Navidad es superbonita y tiene unos colores que se alejan un poco de los más habituales para estas fechas. Los monísimos adornos de galleta, merengue y sprinkles le da un aire muy divertido.

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